Las minu-putillas de party city...

Se ha armado tremendo pedo, a la gringa, como suele suceder en esos lugares como Kansas o Minnesota; con una mamá – Lin Kramer - que estaba shopping online el disfraz de su niña, para este próximo Halloween.

Han de saber que después de vivir 18 años en Estados Unidos de América, jamás me pude explicar bien, el afán por esa puta celebración.

A los gringos y sobre todo a las gringas – de absolutamente todas las edades - les encanta disfrazarse. Es una cosa que simplemente traen ahí en sus genes, es parte de su cultura… es como nosotros los mexicanos con el afán de beber alcohol a la hora-de-la-comida-entre-semana, ellos tampoco nos entienden…

Disfrazarse de condón=normalísimo,

beber un tequila a las 2:30pm = rarisísimo.

El caso es que disfrazarse es lo suyo.

Y ojalá fuera solo Halloween, pero es que no falta la pendeja amiga que dice,

What do we do for my b’day??

I got it girls!

Costume party!!! Yay!

Uta. Es como dice mi amigo César de todas las gringas, “hasta la más sofisticada y elegante, trae una teibolera dentro”

Yo odio disfrazarme.

Odio Halloween de hecho.

Pero a Juliana mi hija, que es media gringa (ya se le está quitando), le encanta Halloween. Y este año me pidió disfrazarse de cheerleader. Yo no le di mucha vuelta al tema, la neta es que la última vez que estuve en NY vi el disfraz de porrista rojo con pon-pons y todo, y dije “de una”, y cuando ella lo vio, dio salto de la felicidad.

Ahora me pregunto si hice lo correcto.

Lin Kramer no estaría nada de acuerdo y creo que tiene algo de razón.

Ya me había tocado a mi comprar disfraces online para mis hijos, cuando estaba en NY, y es verdad que si uno busca disfraces para toddler boys, encuentra al veterinario, al cowboy, al fedex delivery boy, al león, al mago, al vampiro, al doctor… puro personaje honorable.

Pero si buscas en toddler girls, te encuentras a la enfermera sexy, la tigresa, la gatita de batman, la Malibu Barbie, la California Barbie, la Barbie patinadora, la Daisy Duke Barbie… luego la secretaria slutty, la maestra slutty, la vampira slutty, la bruja slutty… ahí hay todo para hacer las fantasías de role playing de cualquier gringo realidad, excepto que – carajo - son niñas de 3 a 5 años.

Lin Kramer escribió cartas a Party City por FB y la bloquearon, ella solamente argumentaba, las diferencias negativas de género entre niñas y niños.

Pero la ignoraron, porque resulta que girl sexy cop es su disfraz más vendido.

Pero ya se sumaron a la causa miles de mujeres más de la Unión Americana, y seguramente Party City acabará reconfigurando su página de disfraces. Así se las gastan en Estados Unidos. Una cadena de mujeres sin que hacer, mueve montañas.

Sin embargo, Lin Kramer si me puso a pensar un poco.

En este pedo de las mujeres.
Las diferencias que no cesan de existir entre ellas y los hombres.

En Juliana vestida de porrista.

En esta definición de géneros, en lo que le toca a las mujeres, el glass ceiling, Hillary Clinton, Sherryl Sandberg, Margarita Zavala, las adelitas de Lopez Obrador… pero si me pongo feminista me ofusco, así que mejor me calmo.

Mientras no se me quiera Juliana ir a perseguir la carrera de vaquerita a Dallas, Texas, todo bien.

Déjate tú la vaquerita, quererse ir a vivir a Texas...